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INCUMPLIMIENTO DE LAS REGULACIONES Y RESTRICCIONES NO ARANCELARIAS, PODRÁN ATRIBUIRSE AL AGENTE ADUANAL
El 2 de septiembre de 2022 fue publicado en el Semanario Judicial de la Federación la Jurisprudencia por “Contradicción de criterio” con el título la “Infracción prevista en el artículo 176, fracción II, de la Ley Aduanera. La conducta consistente en incumplir las obligaciones en materia de regulaciones y restricciones no arancelarias, puede atribuirse al Agente Aduanal”.[1]
En los Hechos, primer párrafo indica: “Los Tribunales Colegiados de Circuito contendientes analizaron si los agentes aduanales pueden ser sujetos o no a la infracción y, por ende, a la imposición de la sanción establecidas, respectivamente, en los artículos 176, fracción II y 178, fracción IV, de la Ley Aduanera”.
En el Criterio jurídico, segundo párrafo menciona: “La Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación establece que es posible atribuir al agente aduanal la conducta infractora relacionada con la introducción o extracción de mercancías al país, contemplada en el artículo 176, fracción II, de la Ley Aduanera y, por ende, imponérsele la sanción correspondiente prevista en el diverso 178, fracción IV, del mismo ordenamiento”.
En la Justificación, última parte señala: “De la interpretación sistemática de los artículos 1o., 35, 36 o 36-A, según sea el caso, 40, 54, párrafos primero y segundo, fracción I, 159 y 162, fracciones II y VII, de la Ley Aduanera, se advierte que el agente aduanal no es un simple promotor del despacho aduanero, sino que su intervención es de suma importancia, pues tiene a su cargo desde indicar la correcta clasificación arancelaria de la mercancía que se pretende sujetar a los regímenes aduaneros aplicables, hasta el correcto llenado y transmisión del pedimento o formulario respectivo y sus anexos, lo que evidentemente trasciende a aspectos arancelarios y no arancelarios. De ahí que el agente aduanal pueda ser responsable en términos del artículo 176, fracción II, de la Ley Aduanera y, por ende, acreedor a la multa contenida en el diverso 178, fracción IV, del propio ordenamiento, siempre que esa hipótesis se relacione con el supuesto contenido ya sea en el diverso 36 o 36-A, según sea la legislación aplicable, o bien, en el artículo 54, párrafo primero, del propio ordenamiento y no se actualice el supuesto de excepción del párrafo segundo, fracción I, de dicho artículo”.
Las Regulaciones y Restricciones No Arancelarias (RRNA) giran en torno de las mercancías, puesto que sobre ellas se imponen autorizaciones, permisos o certificaciones para restringir la entrada y salida del territorio nacional, por consiguiente, es imprescindible identificar cuáles son las medidas no arancelarias aplicables en nuestro país.
El artículo 17, segundo párrafo de la Ley de Comercio Exterior señala que estas medidas consistirán en permisos previos, cupos máximos, marcado de país de origen, certificaciones, cuotas compensatorias y los demás instrumentos que se consideren adecuados para los fines de la LCE. Adicionalmente, el artículo 52, quinto párrafo de la Ley Aduanera establece que las normas oficiales mexicanas se consideran RRNA de acuerdo con la Ley de Comercio Exterior.
La exigencia de las RRNA deberá identificarse a través de las fracciones arancelarias conforme a la Tarifa de la Ley de los Impuestos Generales de Importación y Exportación, además de publicarse por medios oficiales en términos de los artículos 20 y 26 de la Ley de Comercio Exterior y el 36-A de la Ley Aduanera, y en algunos supuestos se identifica como referencia el número de identificación comercial, por ello, es importante determinar correctamente la clasificación arancelaria de las mercancías.
Quienes introduzcan o extraigan mercancías al o del territorio nacional se encuentran sujetos, entre otras obligaciones, a cumplir con las regulaciones y restricciones no arancelarias, es decir, el importador o exportador deberá dar cumplimiento a los avisos, autorizaciones, certificaciones o permisos previo al que se encuentran sujetas las mercancías previo al despacho aduanero, salvo las excepciones permitidas.
Por otro lado, el agente o agencia aduanal, siendo el representante del importador o exportador en el despacho aduanero de las mercancías, tienen la responsabilidad de acuerdo con el primer párrafo del artículo 54 de la Ley Aduanera: “de la veracidad y exactitud de los datos e información suministrados, de la determinación del régimen aduanero de las mercancías, de su correcta clasificación arancelaria y de la exacta determinación del número de identificación comercial, así como de asegurarse que el importador o exportador cuenta con los documentos que acrediten el cumplimiento de las demás obligaciones que en materia de regulaciones y restricciones no arancelarias rijan para dichas mercancías, de conformidad con lo previsto por esta Ley y por las demás leyes y disposiciones jurídicas aplicables”.
No obstante, la citada responsabilidad se encuentra limitada cuando el incumplimiento si provienen de la inexactitud o falsedad de los datos y documentos que el contribuyente le hubiera proporcionado, siempre que no hubieran podido conocer dicha inexactitud o falsedad al examinar las mercancías, por requerir para su identificación de análisis químico o de laboratorio, tratándose de las mercancías que mediante reglas determine el Servicio de Administración Tributaria.[2]
Otro fundamento, que es relevante considerar, es la implicación que tiene el representante del despacho en términos del artículo 195 de la Ley Aduanera, el cual dispone que “tratándose de infracciones derivadas de la actuación del agente aduanal o de la agencia aduanal en el despacho aduanero, la multa será a cargo de los mismos, excepto en los casos establecidos en el segundo párrafo del artículo 54 de esta Ley”.
En este contexto, en el supuesto de no cumplir con dicha obligación se tipificará un supuesto se infracción aduanera, y por lo tanto, se aplicarán las sanciones que corresponden, por ejemplo:
Fundamento | Descripción |
176, II Ley Aduanera | II. Sin permiso de las autoridades competentes o sin la firma electrónica en el pedimento que demuestre el descargo total o parcial del permiso antes de realizar los trámites del despacho aduanero o sin cumplir cualesquiera otras regulaciones o restricciones no arancelarias emitidas conforme a la Ley de Comercio Exterior, excepto tratándose de las Normas Oficiales Mexicanas de información comercial, compromisos internacionales, requerimientos de orden público o cualquiera otra regulación |
178, IV Ley Aduanera | IV. Multa del 70% al 100% del valor comercial de las mercancías, cuando su importación o exportación esté prohibida o cuando las maquiladoras y empresas con programa autorizado por la Secretaría de Economía realicen las importaciones temporales a que se refiere la fracción III. |
De manera ejemplificativa, una empresa realiza la importación de un equipo médico con valor aduana de $200,000 pesos, sin embargo, durante el reconocimiento aduanero se determinó que se omite el cumplimiento del permiso sanitario de importación, el cual es considerado como una regulación o restricción no arancelaria. En consecuencia, la autoridad aduanera impondrá la sanción económica del 70% de valor de las mercancías, lo cual representa el monto de la multa de $140,000 pesos conforme a los dispositivos antes mencionados.
Adicionalmente, debemos recordar que para el representante del despacho aduanero es una causal de cancelación de la patente de agente aduanal o la autorización de la agencia aduanal, independientemente de otras sanciones que proceda, cuando con motivo del reconocimiento aduanero, de la verificación de mercancías en transporte o por el ejercicio de las facultades de comprobación que se efectuaron los trámites del despacho aduanero sin el permiso de las autoridades competentes o sin contar con la asignación del cupo de las mismas, cuando se requiera, o sin realizar el descargo total o parcial sobre el permiso o cupo antes de activar el mecanismo de selección automatizado, salvo las excepciones establecidas.[3]
Cabe señalar, que el artículo 227 del Reglamento de la Ley Aduanera establece que los permisos son todos aquellos instrumentos que emitan las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, cuya finalidad sea la de regular, restringir o prohibir la importación o exportación de mercancías.
Por lo anterior, los importadores y exportadores, así como el representante del despacho aduanero para prevenir la imposición de sanciones, incluso ubicarse en el supuesto de contrabando[4], deberán asegurarse del cumplimiento de las regulaciones y restricciones no arancelarias con base a la información y documentación proporcionada por los usuarios de comercio exterior.
- Conocer la descripción comercial detallada de las mercancías.
- Identificar correctamente la fracción arancelaria y el número de identificación comercial.
- Revisar los acuerdos que establecen el cumplimiento de las RRNA.
- Confirmar las acotaciones de cumplimiento de únicamente o las excepciones de las RRNA.
- Identificar los requisitos especiales de obtención (mercancías, cantidad, proveedores, estudios, pago de derechos etc.)
- Contar con una resolución de la autoridad competente que indique que las mercancías objeto de la operación no se encuentra sujeta al cumplimiento de las RRNA, y en su caso, una declaración bajo protesta.
- Realizar la gestión en el trámite de la ventanilla única o presencial en la dependencia competente.
- Conocer los documentos e información anexa requerida.
- Identificar el costo pago de derechos, o bien, si es gratuito.
- Revisar los plazos de la resolución y vigencia de la autorización.
- Verificar continuamente el cumplimiento de las obligaciones.
- Identificar los fundamentos normativos de cumplimiento.
- Integrar el expediente aduanero de los trámites realizados.
El “Registro de Despacho de Mercancías” otorga grandes beneficios a los importadores en materia de exclusión de sanciones aduaneras derivadas de facultades de comprobación. Asimismo, es una medida de facilitación para los representantes del despacho porque al llevar a cabo los trámites de importación de las empresas que cuente con este registro los exime de cualquier responsabilidad en materia aduanera, siempre y cuando los hayan registrado previamente ante la autoridad aduanera.
Los agentes aduanales al promover el Registro de Despacho de Mercancías entre los importadores tienen la oportunidad de trabajar con empresas confiables ante la autoridad aduanera, que llevan a cabo un estricto control de las mercancías que son objeto de las operaciones de comercio exterior, lo que permite reducir el riesgo de la responsabilidad solidaria originada por la actividad aduanera.
“En TLC Asociados desarrollamos un equipo multidisciplinario de expertos en auditorías y análisis de riesgos para asesorar, implementar estrategias y dar cumplimiento en operaciones de comercio exterior”.
Para más información o comentarios sobre esta publicación contacte a:
Ricardo Méndez Castro
División de Consultoría
TLC Asociados SC
[1] Cfr. Registro digital: 2025190, portal SCJN: www.scjn.gob.mx, septiembre 2022.
[2] Cfr. Artículo 54, segundo párrafo, fracción I de la Ley Aduanera.
[3] Cfr. Artículos 165, fracción II, inciso b) y 167-J, fracción II de la Ley Aduanera.
[4] Cfr. Artículo 102, fracción II del Código Fiscal de la Federación.
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